Una vez me pregunté que qué era el amor. Sinceramente no lo sabía. En una sociedad donde las esposas se están convirtiendo en las amantes clandestinas de sus propios maridos, no es de imaginar que el concepto de amor esté evolucionando hacia algo también clandestino. Vemos a los enamorados como una especie de secta rara, prohibida y oculta, donde para distinguirse, utilizan algún tipo de señal codificada. Qué no es un corazón obviamente, pues serían descubiertos, puesto que tienen que llevar cuidado, porque si son identificados, por los fríos comensales, pueden acabar en el calabozo de la soledad.
Esta secta es peligrosa, porque no distingue de clases, estatus, roles, edades, intereses, razas, sexo, errores, dificultades ni condiciones. Se pueden mezclar todos con todos, sin hacer distinciones. Miento, si hay una condición, tienen que amar a su pareja hasta que se apague el sol. Para no ser descubiertos, utilizan mensajes ocultos, en versos, en canciones, a través de sus ropas, en sus actividades diarias ... Todo vale, para crear la ilusión del amor.
Hay unos pocos afortunados, que tienen como privilegio el beneplácito de su sociedad, para poder mostrarlo sin ningún tipo de tapujos. Lo pasean, le dan de comer, lo visten, lo limpian cuando se ensucia, si es menester. Pertenecen a una clase superior, que produce la admiración de todos. Son cómo Reyes y Reinas elegidos por Dios, para el que crea obviamente, iluminados en sus consciencias, para poder mostrarlo como su referencia. Es la élite de todas las castas. Fue la primera en engendrarse en el mundo. Ellos son los elegidos para identificar el profético verdadero amor, y cómo caballeros y damas, han luchado para obtenerlo en grades batallas. Han hecho de él su código ético. Y si es necesario han muerto para defenderlo.
juega con tu sonrisa, para encender nuestra llama.
El amor crece con el rocío de la mañana,
juega con mi corazón, para crear nuestra unión.
El amor madura con los hilos de la esperanza,
juega con los tiempos, para proteger nuestros recuerdos.
El amor perdura con el fuego del ansia,
juega con la pasión, para florecer en cada emoción.
Pero ¿qué es el amor? ¿cómo llena nuestras almas? Somos juguetes a su merced, maneja nuestros hilos sin más premisa, que buscar una sonrisa de felicidad en el alba de una mirada. Mirada cómplice, que nos llena de esperanzas, para seguir viviendo en cada madrugada. No cabe dolor si sabes mimarlo, pues a veces, es cómo un niño maleducado. Te mina despacio, cómo un virus descontrolado. Ten por seguro, que cuando te llena, quedarás inmunizado a su antagonía, por lo que vivirás feliz, sintiendo su acelero, permitiéndote vivir sin consuelos.
"Amor, calla, que mi alma se ensalza,
ante tu belleza, cuando me miras sin decir nada,
pues en la nada te espero, pues soy el que te ama,
porque sé que en tu todo nació mi nada."
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